La actual Casa-museo de Portlligat fue la única casa estable de Salvador Dalí, el lugar donde vivió y trabajó habitualmente hasta que, en 1982, con la muerte de su esposa Gala, fijó su residencia en el Castillo de Púbol. Esta casa museo, única en el mundo, te abre sus puertas para que descubras el universo artístico y cotidiano del genial pintor catalán que pasó los mejores años de su vida en ese rincón mágico de la Costa Brava.
La casa, que se construyó sobre diferentes barracas de pescadores que compró Dalí en Portlligat, tiene una estructura laberíntica con tres partes diferenciadas entre las zonas privadas de la pareja, el taller del pintor y la zona exterior.